Pep Guardiola puede haber dirigido a grandes multitudes en juego, pero ninguna como la que dirigió en Barcelona el domingo, cuando se presentó el caso de un referéndum sobre la independencia catalán.
Hablando en las gradas de Montjuïc ante un estimado de 40.000 de sus conciudadanos, y flanqueado por una enorme pancarta con el lema “Amor a la Democracia”, el ex del Barcelona y actual técnico del Manchester City hace una lectura a un breve manifiesto en catalán, español e Inglés.
La multitud afirmo que han intentado en 18 ocasiones poder llegar a un consenso sobre un referéndum y siempre se ha recibido la misma respuesta negativa.
La única opción es la votación. Por lo que ha dicho que hacen un llamado a la comunidad internacional para que nos apoyen y demócratas en todo el mundo que nos ayude a defender los derechos que están amenazando en Cataluña, como el derecho a la libertad de expresión y el derecho al voto.
El viernes, el gobierno catalán anunció que un referéndum sobre la independencia de España se llevaría a cabo el 1 de octubre. El gesto retador se topó con una respuesta muy familiar de Madrid: tal votación es ilegal, así que no se le permitiría seguir adelante.
El primer ministro de España dijo que ellos pueden anunciar un referéndum tantas veces como quieran, pero el referéndum no va a tener lugar, Soraya Sáenz de Santamaría. Otro ministro desestimó todo este proceso como un nuevo paso en una estrategia que no lleva a ninguna parte.
Los secesionistas no están de acuerdo, argumentando que se han visto obligados a mantener el voto debido a los repetidos esfuerzos para comprometer al gobierno español se han visto frustrados o ignorado.
Carme Forcadell, el líder del parlamento catalán, recibió una gran ovación en la manifestación de Barcelona cuando le dijo a la multitud con banderas “no hay plan B, el único camino a seguir es un referéndum”.
Cataluña ya había celebrado un referéndum no oficial en noviembre de 2014 en la que el 80% votó por la independencia. “Creo que la participación será más alta que en 2014 debido a una gran cantidad de personas que quieren tener su opinión,” dijo Jesús Espinosa “Hemos estado luchando por esto durante 300 años y no vamos a parar ahora.”
“Lo que quiero para nosotros es tener la oportunidad de votar y convertirnos en una república independiente catalán y hacerlo legalmente y pacíficamente. Madrid responderá como siempre lo ha hecho, porque Cataluña es una fuente de ingresos y van a luchar con todo lo que tienen para mantenerlo “.
Después de que las concentraciones de masas en los últimos años han atraído a más de un millón de personas, si la participación es de sólo unas decenas de miles, según el gobierno catalán, podría ser visto como decepcionante. De acuerdo con una encuesta al final del mes de marzo, el apoyo a la independencia está cayendo, con el 48,5% de los catalanes se oponen a separarse de España, mientras que el 44,3% apoyado ruptura.
Lo que sucedió, agregó, en el gobierno catalán mantiene su compromiso de un referéndum, independientemente de su resultado.